Una Carta de Amor

Contigo;
Mis penas se convierten en alegrías, mis temores en valentía,
Mis inseguridades en seguridad, mi vida monótona en una vida muy intensa, mi cuerpo dormido despierta con el tuyo y lo mantiene caliente y siempre listo para amarte.
Mi corazón estaba como un pedazo de hielo y desde que viniste a mi vida es como si tengo un brasero en el pecho caliente, emotivo, lleno de ilusiones, y más que todo completo de amor.
Si un día mío esta triste se convierte en la mejor de mis alegrías, solo escuchando tu voz, cambia todo y mi ser se enciende de alegría y solo Dios sabe lo que siento por estar contigo, me muero de deseo de tu cuerpo, necesito tanto tus brazos...., me hace falta tu boca, quiero tocarte y al mismo tiempo amarte.
Mi sol brilla con tanto fulgor en el Viejo Continente donde aprendí por primera vez el amor de verdad, mi existencia es tan especial ahora por que se por quien tengo que vivir por el ser mas tierno y dulce que en mi paso esta. Amor te he escrito tanto y de mil maneras, te podría decir lo que tu significas para mi, mi cielo eres tu, mi vida eres tu, mi destino eres tu, si tu eres mi mismo amor el mas puro y sincero, te amo como a nadie lo hice.
Amor mío te añoro, y te necesito tanto aunque me das fuerzas por que yo se que tu habitas en mi por que somos los dos un solo ser.
Te llevo en mi todo el tiempo, me sumerjo todos los días en las aguas celestiales de tu amor y me despierto después de haberte amado en silencio toda la noche sin que te des cuenta he pasado a tu lado y cuidado tu sueño.
Realmente te amo mucho mi cielo cuídate que yo también lo haré por ti por que eres mi propia vida.
A. P. Illingworth

Publicaciones